Reciclar es bueno, reutilizar es mejor.

Reutilizar y reducir en la economía circular: esto es lo que puede hacer

El desperdicio es inevitable, pero debemos adoptar un enfoque circular en lugar de lineal para abordarlo. El enfoque circular implicaría que reutilizamos o reciclamos nuestros residuos, pero actualmente una proporción muy grande de residuos se tira a la basura, principalmente en vertederos, algunos incinerados.

Echemos un vistazo a Sudáfrica. En 2017, el país generó un total de 54 millones de toneladas de residuos, de los cuales el 38,6% se recicló y el 61,4% se depositó en vertederos. Estas estadísticas relativamente prometedoras se ven mucho peores cuando se agregan los 66,8 millones de toneladas de desechos peligrosos a la ecuación, lo que hace un total de 110 a 120 millones de toneladas de desechos por año, y esas cifras no incluyen los desechos de la minería. Cuando se suman los desechos regulares y los desechos peligrosos, solo el 6.3% se recicla, el resto termina en los vertederos. En conjunto, el 79% de los residuos va al vertedero. Por tanto, el 21% de los residuos se recicla / recupera. Es desastroso para una economía de esta estatura y madurez. Actualmente se recicla el 58% del papel, el 78% del vidrio y el 75% del metal. Para los plásticos, la cifra es del 43%. Los microplásticos representan una seria amenaza para toda nuestra cadena alimentaria.

El problema puede parecer demasiado grande para que lo navegue la gente común, pero el punto es que la transición a una economía circular comienza cuando los productores de bienes y servicios se ven obligados a adaptarse a lo que los consumidores prefieren y compran. ¿Qué podemos hacer al nivel del ciudadano común, qué medios de acción para un hogar?

Un paso es dejar de enviar residuos orgánicos al vertedero y los servicios de gestión de residuos deberían dejar de recolectar material orgánico, que es más de la mitad de agua. Al adoptar el enfoque circular, deben devolverse al suelo, por ejemplo, convirtiéndolo en abono. La naturaleza funciona mediante el reciclaje: piense en las hojas muertas que se convierten en nutrientes y mantillo para las plantas. La tierra necesita su humedad, oligoelementos y fibras para seguir siendo fértil y productiva.

Algunos pueden recordar los días en que la leche y los jugos de frutas se entregaban en botellas de vidrio hace décadas por la noche, utilizando vehículos de entrega a batería para no despertar a la multitud. Bueno, sería bueno volver a él porque el vidrio es prácticamente reutilizable e infinitamente reciclable. De esta manera, podríamos detener la demanda de plásticos de un solo uso y envases compuestos complejos para reciclar.

Reciclar es genial, pero reutilizar es aún mejor. Y esa debería ser nuestra primera opción. Solo entonces podremos considerar reciclar lo que no se puede reutilizar.

Lo principal es que tenemos que volvernos más regenerativos en nuestra vida diaria. No tenemos otra opción si queremos sobrevivir.

Fuentes : revista "Simply Green"