Esta es una excelente noticia que nos llega desde Bélgica. En 2018, el gobierno de Flandes, la única región de Bélgica que todavía permitía la cría de pieles, aprobó un decreto para poner fin a la práctica. Las últimas granjas de visones en el país debían cerrarse para 2023, salvando la vida de miles de animales.
El fin de la industria peletera de Bélgica sigue a décadas de trabajo de las organizaciones de derechos de los animales, incluidas las entidades de PETA y el grupo belga de bienestar animal GAIA. La demanda de pieles ha terminado, los consumidores se alejan de la crueldad inherente a este material y casi todas las grandes marcas de moda han decidido prescindir de ellas, como Chanel, Moncler, Dolce & Gabbana y Canada Goose.
Los grandes nombres saben que la piel está muerta
Como parte de la campaña para prohibir las granjas de pieles en Bélgica, en 2017, la directora honoraria de PETA USA, Pamela Anderson, envió una carta al entonces ministro Ben Weyts, destacando que “esta crueldad bárbara es inaceptable en un país civilizado y progresista”, y estamos encantados de ver que Bélgica finalmente ha puesto fin a esta práctica viciosa.
Las granjas de pieles son un infierno.
Los visones son animales inteligentes y sensibles a los que les gusta pasar el tiempo nadando y trepando.
Sin embargo, en las granjas peleteras se mantienen en jaulas de alambre sucias, tan pequeñas que solo pueden dar unos pocos pasos en cada dirección, lo que puede hacer que se muerdan las patas o la cola por la frustración. Suelen sufrir heridas abiertas e infecciones y no reciben atención veterinaria. Los criadores de pieles utilizan los métodos de matanza más baratos disponibles, que incluyen rotura de cuello, envenenamiento, electrocución genital y asfixia.
Las granjas de visones están diseñadas para maximizar las ganancias y los ganaderos a menudo tienen poca consideración por el bienestar animal, como lo han demostrado repetidamente las encuestas publicadas por PETA. Los animales de estas granjas se ven acosados diariamente por el miedo, el estrés, las enfermedades, los parásitos y otras dificultades físicas y psicológicas. Estas condiciones también crean caldos de cultivo para enfermedades y las granjas se han identificado como focos de COVID-19.
Jo-Anne McArthur / Djurrattsalliansen
Bélgica acaba de unirse oficialmente a la creciente lista de países que han cerrado todas sus granjas de pieles, que también incluye a Bosnia y Herzegovina, Croacia, República Checa, Italia, Luxemburgo, Macedonia del Norte, Noruega, Serbia, Eslovenia y Reino Unido.
En Francia, solo está prohibida la cría de animales salvajes por su piel: todavía hay unas diez granjas de conejos Orylag, criados por su piel, y una treintena de granjas de conejos de Angora. Por lo tanto, miles de animales todavía son sacrificados y desollados cada año para alimentar una moda bárbara.
Publicado el 08-02-2022 10:45
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